Entrevista con Karla Rey: “Ser muxe es abrazar mis raíces y alzar la voz desde la cultura”

En un país donde la diversidad florece desde lo profundo de las raíces indígenas, Karla Rey brilla como una voz imprescindible. Originaria de una familia oaxaqueña, pero nacida en la Ciudad de México, Karla es muxe citadina, artista, bordadora, promotora cultural y una de las referentes actuales del movimiento muxe fuera de Juchitán.

En entrevista exclusiva con Ámame Trans MX, Karla habló sobre su identidad, las barreras que ha enfrentado por su origen indígena, su visión sobre el papel de la familia y su trabajo como difusora cultural.

¿Cómo ha sido tu camino personal como muxe?

“Siempre antepongo primero la cuestión muxe, que es mi cultura y mis raíces. Yo pude haber sido una chica trans citadina, pero decidí rescatar lo que me pertenece: mis orígenes. En mi familia ha habido muxes, y para mí es un homenaje también a mis abuelas. Yo soy muxe citadina porque crecí en la CDMX, pero mi corazón es 100% oaxaqueño. Migramos porque Oaxaca, siendo uno de los estados más ricos culturalmente, también es de los más pobres.”

¿Qué significa para ti ser muxe en la sociedad actual?

“Yo ya he recogido flores que sembraron otras compañeras. Muchas veces nos ven solo desde la fiesta, desde lo visual, pero ser muxe es resistir, preservar y visibilizar. El amor por mi cultura es lo que me ha posicionado. Me he ganado espacios en la ciudad desde mi trabajo, desde mi historia. Ser muxe es cargar con una cultura que a veces se idealiza, pero también se castiga.”

¿Has enfrentado discriminación?

“Más que por mi identidad de género, ha sido por mi origen indígena. Una vez, en un evento en el Zócalo, vestida de tehuana, estaba comiendo y una familia me confundió con personal del restaurante. También tuve una pareja que me dijo ‘eres morena pero no como los oaxacos’. Me levanté y me fui. Hay mucha ignorancia que aún se arrastra.”

¿Qué papel juega la familia para una persona muxe?

“Se dice que las muxes somos las que cuidamos a los padres. Y sí, en muchos casos es así. Pero a veces eso se romantiza. Yo cuidé 10 años a mi madre y, cuando pedí ayuda, me dijeron: ‘el que no tiene dinero es porque no trabaja’. Eso duele. Muchas veces somos las que se quedan en casa, las que no hacen su vida por cuidar a otros. Yo he vivido eso en carne propia.”

¿Cómo crees que podemos educar más a la sociedad?

“Más que educar, hay que sensibilizar y visibilizar. En Colombia tienen referentes como las maricas del sur. En México necesitamos visibilizar más lo muxe. No solo con trajes y fiestas, sino con nuestras realidades, dolores y resistencias.”

¿Qué sueñas lograr?

“Mi meta siempre ha sido vivir bajo mis propios ideales. En mi adolescencia me prometí ser feliz, hacer lo que me gusta: bailar, bordar, trabajar con textiles. No quiero quedarme esperando una estabilidad impuesta, quiero vivir lo que el corazón me dicta.”

¿Qué mensaje dejas para otras mujeres trans y muxes?

“Que se amen a sí mismas, que se acepten, que la feminidad no está en la sexualidad. Que estudien, que se preparen. Todo empieza con el amor propio. No todo es la fiesta o el físico, también hay que pensar para qué quiero modificarme o vestirme así. Todo debe tener una raíz interna.”

¿En qué proyectos estás ahora?

“Tengo un podcast llamado Hilando Resistencias, y formo parte del colectivo Verbena Muxe, donde damos talleres de bordado, danza, expresión corporal y artesanías. Además, este año seré capitana de la Vela Muxe de CDMX, un honor enorme, sobre todo porque también participé con las Auténticas Intrépidas Buscadoras del Peligro, que este año cumplen 50 años. A ellas les debemos mucho.”

Karla Rey no solo porta con orgullo su traje de tehuana, también lleva en la voz la historia de cientos de muxes que siguen transformando la sociedad desde la cultura, la resistencia y la ternura.