Beth McCarthy “bautiza” a una fan trans en pleno concierto: un acto de amor, identidad y comunidad

En medio de un concierto cargado de emoción y calidez, la cantante británica Beth McCarthy protagonizó un momento profundamente conmovedor al ayudar a una fan trans a encontrar su nuevo nombre. Más allá de la música, lo que ocurrió en el escenario fue un acto de reconocimiento, ternura y afirmación identitaria.

Durante su show, McCarthy notó entre el público a una joven visiblemente conmovida. Al acercarse, le tomó la mano y, tras una breve conversación, le propuso un nombre: Luna. La fan, emocionada hasta las lágrimas, aceptó de inmediato. El público estalló en vítores y aplausos al presenciar este momento de conexión genuina.

“Pensaba guardar ese nombre para cuando tuviera una hija”, confesó Beth con dulzura,

“pero tú brillas como la luna. ¿Te gustaría llamarte Luna?”

La respuesta de la fan fue clara y llena de gratitud: “¡Sí, gracias!”. Entre abrazos y risas, incluso bromeó: “Creo que ahora soy tu hija, me estás adoptando”. McCarthy siguió el juego con entusiasmo, y la nombró oficialmente “Luna” con su micrófono en alto, como si se tratara de un ritual simbólico de bienvenida y aceptación.

El gesto no terminó ahí: la cantante le dedicó la siguiente canción y más tarde publicó el video del momento en sus redes sociales, escribiendo:

“Gracias, Luna, por confiar en mí con el increíble honor de elegir tu nuevo nombre. Espero que te ayude a brillar aún más de lo que ya lo haces. Siempre estarás en mi corazón.”

Las reacciones en TikTok e Instagram fueron inmediatas. Cientos de usuarios compartieron mensajes de amor, empatía y celebración. “Eso sí fue un bautismo”, comentó alguien. Otro agregó: “¿Cómo no amar a la comunidad queer? Esto es hermoso”.

Varios destacaron el impacto emocional del momento: “La expresión en su rostro cuando escuchó su nombre fue lo más puro que he visto. Fue un instante en el que todo hizo clic. ¿Cómo puede alguien negar lo importante que es esto?”.

Beth McCarthy, quien se identifica como bisexual, ha construido una carrera marcada por letras que celebran la diversidad, el amor propio y las experiencias queer. Con este gesto, reafirma que la música también puede ser un acto de sanación, de nombrar lo innombrable y de dar espacio a quienes siguen buscando su lugar en el mundo.