Activistas trans toman la Cineteca Nacional para exigir justicia y renombrar el espacio como “Plaza de las Mujeres Trans Indómitas”
- Amame Trans
- 29 nov
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La memoria, la resistencia y la digna rabia se hicieron presentes en la Cineteca Nacional el pasado 22 de noviembre, cuando un grupo de mujeres trans y colectivos aliados realizaron una intervención simbólica para denunciar la violencia institucional y la criminalización que enfrenta la activista Razzia Santillán.
La acción se enmarcó en el Día Internacional de la Memoria Trans, una fecha que recuerda a las víctimas de la transfobia en el mundo, pero también celebra las luchas que la comunidad ha levantado históricamente en México.
Una placa que honra a las mujeres trans y confronta al Estado
Frente a visitantes, activistas y medios, integrantes de colectivos como Clan Mariposas Negras el primer tianguis cultural trans de Latinoamérica, Lenchitudes Antifa, House of Carnalas y otras agrupaciones, colocaron una placa conmemorativa en las instalaciones del recinto cultural.
La pieza, acompañada de la lectura de un poema, reivindica la resistencia de las mujeres trans frente a décadas de discriminación, exclusión y violencia estructural. Ese acto marcó el nacimiento oficial de la “Plaza de las Mujeres Trans Indómitas”, un espacio simbólico dentro de la Cineteca que reconoce la fuerza colectiva de quienes han sido históricamente invisibilizadas.
El caso de Razzia Santillán: cuando la denuncia se convierte en criminalización
El acto también puso en el centro el caso de Razzia Santillán, quien desde 2023 mantiene una protesta pacífica dentro de la Cineteca Nacional.
El 12 de septiembre de ese año, Razzia fue expulsada del baño de mujeres por personal del recinto, en un episodio de abierta transfobia. Tras ello, la activista inició una ocupación cultural en el pasillo central, donde instaló un tianguis trans, talleres, actividades artísticas y un punto de encuentro comunitario.
Sin embargo, en lugar de recibir justicia o disculpas institucionales, Santillán fue objeto de una demanda por 200 mil pesos, derivada de una intervención artística realizada en enero de 2025. Su defensa, liderada por la abogada Jessica Marjane, denuncia la omisión de la Secretaría de Cultura al no atender oportunamente la queja presentada ante el Órgano Interno de Control.
Solidaridad que se vuelve territorio
Para Razzia, la inauguración de esta plaza simbólica representa la culminación de más de dos años de trabajo organizativo y resistencia creativa. También muestra el poder del tejido comunitario trans y lésbico, que ha transformado la protesta en un refugio de acompañamiento, arte y visibilidad política.
La acción en la Cineteca, más que un acto aislado, es un recordatorio de que las mujeres trans continúan exigiendo espacios seguros y políticas públicas que realmente atiendan sus necesidades. Y sobre todo, que ninguna persona debería ser criminalizada por defender su dignidad.
